jueves, 28 de junio de 2012

Mi niña adorada:

Si supiera que hoy fuera la última vez que te veo dormir, te abrazaría fuertemente y oraría al señor para poder ser el guardián de tus sueños y tu alma.

Siempre hay un mañana y la vida nos da otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuánto te  quiero y que nunca te olvidaré; dejas un corazón partido de dolor por tu ausencia pero feliz también porque vas a poder cumplir tus sueños y pediré a Dios muchas bendiciones para ti como también para tu esposo; que Dios los acompañe siempre y me les de muchos éxitos.

Diego:
Le pido el favor de que nunca cambie con mi niña, quiérala y protéjala en todo sentido como ella con usted, por eso son el uno para el otro. Les pido de todo corazón que nunca cambien y se quieran cada día más, y más tan lejos como van a estar de sus seres queridos.



Todo lo que ves aquí está escrito con lágrimas y mi corazón hecho pedazos, pero también con una enorme felicidad porque estás consiguiendo lo que quieres.

Muchos éxitos, que Dios me los bendiga y proteja y los acompañe y ayude.

Tu mamita Ana que tanto te quiere.
Tú sabes cuánto TE AMO.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.